Por Vivian Urfeig

25.03.2022

Después de dos años entre paréntesis, uno de pandemia y otro con edición acotada y adaptada a la crisis sanitaria, entre el 7 y el 12 de junio se celebra la 60° edición del Salón Internacional del Mueble en Milán, la tradicional exposición de interiorismo. La reconfiguración de la feria traspasa las fronteras del equipamiento, la decoración y el mobiliario: en 2022, el foco está puesto en la reflexión sobre hábitats sostenibles, regeneración urbana y vínculos con la naturaleza.

La ciudad como set escenográfico se prepara para alojar exposiciones inmersivas, muestras e instalaciones con propósito. Y no solamente en el predio de Rho, el gran contenedor de la feria proyectado por el arquitecto Massimiliano Fuksas, sino que las experiencias latirán por todos los barrios. La apuesta es fuerte. Tanto, que el propio alcalde milanés Giuseppe Sala recalcó que pese al "desafortunado momento histórico que vivimos”, la expectativa por palpitar la semana más importante del año va en aumento. “Es una energía arrolladora que contagia a toda la ciudad", señaló durante la conferencia de prensa.

En este sentido, el proyecto Design With Nature destacará el esfuerzo por alinearse a la economía circular y los estándares de reutilización. La dirección del arquitecto Mario Cucinella impulsará a pensar la ciudad como la “reserva” del futuro, una usina de producción con mínimo impacto en el medioambiente. Así, la casa-vivienda-hogar se transforma en la primera pieza del rompecabezas urbano. En palabras de Maria Porro, presidenta del Salone y tercera generación al frente de la firma de interiorismo que lleva su apellido, "queremos que todos los visitantes se involucren con los materiales alternativos que ya se están industrializando. Las ciudades así se transforman en usinas de materias primas”. A su vez, Porro anticipó: “Este es un punto de referencia para toda la industria. No podemos parar, tenemos el deber de acelerar en pos de soluciones de diseño, de cara a generar procesos sostenibles en tanto en la producción como en la distribución. Urge un enfoque ético del diseño. En este Salone impulsamos una transición ecológica real, nos convertiremos en un acelerador de procesos”.

Design With Nature: el proyecto del arquitecto Mario Cucinella impulsará a pensar la ciudad como la “reserva” del futuro, una usina de producción con mínimo impacto en el medioambiente. Gentileza Salón del Mueble de Milán.

Manual de estilo para los nuevos formatos expositivos

La sostenibilidad marca el camino. Desde la organización de la exposición, se sugirió a diseñadores, arquitectos, expositores, artistas y protagonistas que opten por materiales reutilizables, de bajo impacto y certificados. Con el mínimo desperdicio de energía eléctrica y agua, también deberán contemplar la logística de montaje y prever dónde y cómo se reciclarán los paneles y demás componentes de cada stand.

Las nuevas generaciones también están convocadas a presentar propuestas a tono con el uso equitativo y responsable de los materiales. En el Salón Satélite, el trampolín vanguardista de 600 diseñadores sub 35, la consigna será el diseño inclusivo: “Nos interesa la mirada de los jóvenes sobre la autonomía, el confort, el movimiento, la interacción y la seguridad”, explicó Marva Griffin Wilshire, fundadora y directora hace 23 años de esta sección. El Salón Satélite subraya su función de puente, de conexión entre la industria, las facultades de diseño y las nuevas startups del mundo del diseño.

La Caja Mágica: un programa que reúne a distintos cineastas para que cada uno filme un concepto clave de la 60° edición. Gentileza Salón del Mueble de Milán.

Por los barrios

La Caja Mágica es el programa que reúne a once cineastas italianos. Cada uno filmará un concepto clave de esta edición de la fiesta del diseño. Claudio Giovannesi aceptó el desafío de rodar un corto que represente la cultura. Francesca Archibugi hará lo propio con la emoción, Wilma Labate con diseño, Daniele Ciprì con Milán.
Por otra parte, los afiches diseñados por el ilustrador Emiliano Ponzi tapizarán la ciudad. Ponzi realizó seis trabajos, uno por cada década del Salón del Mueble. El conjunto representa el vínculo estrecho entre la feria, la ciudad y la evolución del diseño desde 1961. Join the design wave (unirse a la ola del diseño) es la consigna y entre los recursos narrativos, Ponzi destaca: “Los interiores de Milán de la década del ’60, los colores rojo y negro, la ciudad en movimiento, la atmósfera hippie de los ’70, la era pop de los ’80. Luego, me inspiré en la Scala de Milán, los conciertos y ballets. Y finalmente, el impactante predio ferial de Fuksas y la puerta abierta al futuro que contagia el Salón con sus valores inclusivos y sostenibles”.

Junto al estudio Alkanoids, especializado en motion graphics y animación en 2D y 3D, el ilustrador generó un sistema de elementos digitales que serán protagonistas . A partir de códigos QR las piezas de realidad aumentada estarán disponibles a solo un click en los celulares. El Duomo, los palacios y la Torre Velasca: íconos de Milán que se colarán en las pantallas, transformando el evento en un festival de sensaciones para experimentar. Milán renovará en junio su lugar en el podio de ciudades creativas, una gran plaza pública abierta al mundo donde todos están invitados a repensar el futuro del habitar.

Foto de portada. Sala delle Cariatidi. Gentileza Salón del Mueble de Milán.