Por Silvina Vitale

13.10.2022

A diferencia de la arquitectura, con plazos más prolongados, el mobiliario tiene la capacidad de adaptarse fácilmente a esos cambios sociales que progresivamente modifican los lugares en los que vivimos. Sobre este eje, Rial y Scola construyen una propuesta conceptual guiada por los nuevos usos de lo cotidiano.

“Tratamos de entender cómo viven las personas, cómo habitan los espacios y a partir de eso proponemos soluciones acordes a las formas de vivir contemporáneas”, explica Rial. “Para nosotros, el diseño es una manera de agregar valor, por eso, la idea de estilo no es para nosotros un elemento con el que nos identificamos, nos enfocamos en detectar necesidades y darles una respuesta”, aclara.

Formados en diseño industrial, hicieron del desarrollo de mobiliario el fuerte de La Agencia desde que comenzó en 2015; se concentran en el desarrollo de catálogos para el proyectista, es decir, sus clientes son esencialmente fabricantes y no el consumidor final. El estudio se afianzó en la venta de servicios al exterior -a países como Brasil, Italia, España o Argentina-, actividad que hoy representa el 90% de su trabajo. Sus diseños recibieron prestigiosos reconocimientos como el Premio Platino en el A´Design Award en Milán y el Good Design Award en Chicago.

Los diversos componentes del sistema: aparadores, islas, despensas y alacenas, son capaces de integrar elementos necesarios y cumplir con todos los requerimientos ergonómicos, técnicos y funcionales de una cocina. Gentileza La Agencia

¿Existen nuevas formas de habitar los espacios?

Sebastián Rial (SR): Sin duda, la transformación en la forma en que las personas habitan las casas en los últimos cincuenta años es impresionante. Quizás, lo más destacado es el límite difuso que hoy existe entre lo laboral y lo doméstico, pero en realidad, estas modificaciones tienen que ver con otras que explican todos estos cambios.

¿Qué factores dieron origen a esta nueva forma de habitar?

SB: La transformación de la familia nuclear, la emancipación de la mujer, la aparición de la tecnología, que son elementos que cambian la forma en que hacemos las cosas todos los días.

¿Los espacios pueden adaptarse fácilmente a estos cambios?

SB: Justamente, mobiliario viene de lo móvil y tiene esa capacidad de poder adaptar fácilmente los espacios. Si bien hay una transformación radical en las formas de uso, por su condición material, la arquitectura no puede ser transformada cada diez años y, entonces, el mobiliario y el equipamiento representan una solución interesante para poder adaptar las espacialidades y no quedar frenados ante los cambios.

¿Cuál es el lugar de la casa más afectado?

SB: Sin duda, hay varios puntos en los que nos podemos detener, pero la cocina se convirtió en una verdadera protagonista porque hoy es un espacio de encuentro, de estar, de trabajo. En ese sentido, es uno de los ambientes que más se integró al resto de la vivienda. Hay que tener en cuenta que en los últimos 20 o 30 años la cocina salió de ese lugar de habitación relegada y, sin embargo, si bien es cierto que siempre tiene cara de cocina, el propósito es integrarla cada vez más al resto de la casa.

Diseñadas para verse y sentirse como piezas de mobiliario, las unidades independientes que componen el sistema KUK diluyen los límites de la cocina. Gentileza La Agencia

¿Cómo se logra?

SB: La cocina hoy mantiene sus características esenciales porque eso es fundamental, pero nosotros concebimos una que nos sirva perfectamente para tener una reunión de trabajo o que esté plenamente integrada al resto del hogar. Trabajamos muchos equipamientos con los que podrías tener tranquilamente una reunión de negocios por teléfono porque la imagen que se proyecta es la de una pieza de mobiliario.

El mobiliario tiene que ser más funcional y flexible

SB: -Exacto, tiene que tener esa capacidad de poder adaptarse a las necesidades del usuario. Por ejemplo, una mesa de comedor puede ser un escritorio, pero no hay que pensar en algo como un transformer, sino en que el elemento tenga las cualidades para dar soporte a las dos cosas.

¿Qué otros espacios se adaptaron a las nuevas necesidades?

SB: El baño, por ejemplo, que hoy es más un spa, o el dormitorio que es un lugar más intimista, de encuentro con uno mismo. Estamos ante una transformación en las funciones tradicionales de los espacios y, en ese sentido, el mobiliario tiene un rol determinante.

¿Qué rol tuvo la pandemia en esta nueva etapa?

SB: Probablemente, aceleró un proceso que ya estaba en marcha y sobre el que nosotros veníamos trabajando. Creo que hay determinados elementos que son clave, como los límites entre el espacio de trabajo y lo doméstico que venían replanteándose y que hoy son algo absolutamente difuso. La pandemia visibilizó o cuestionó este límite entre el trabajo y la casa.

¿Qué otros factores aceleraron estos cambios?

SB: Creo que las transformaciones en los núcleos de familia fueron determinantes. Si nos vamos a 1950, la familia nuclear tipo eran mamá papá y dos hijos y hoy existe una enorme diversidad de tipologías familiares, que son muchísimo más dinámicas. Esto hizo que las funciones de la vivienda se transformaran radicalmente, los espacios necesitan ser más flexibles, transformables y dinámicos.

KUK es una nueva forma de pensar y planificar el espacio de la cocina. El sistema modular, inspirado en piezas de mobiliario, está concebido para reinterpretar el ritual de la cocina. Gentileza La Agencia

¿Cómo lo resuelven?

SB: Las necesidades son infinitas y cada vez hay más, y es importante tener la capacidad de diseñar piezas de mobiliario que puedan dar soporte a distintas actividades.

Victoria Scola (VC): -Creo que aquí es donde la arquitectura tiene un enorme desafío porque es mucho más difícil que pueda transformarse o modificarse. Por eso, el mobiliario tiene un rol muy importante que cumplir porque tiene esa posibilidad de estructurar y modificar el espacio.

¿Cuáles son sus próximos proyectos?

En este momento estamos lanzando una marca en Uruguay, El Bazar, en la cual nos asociamos con un fabricante y entre toda su propuesta hay una nueva línea de cocinas llamadas Kuk, un sistema modular que reinterpreta el ritual de cocinar y que este año ganó una medalla de plata en el New York Design Award. Por otra parte, también estamos trabajando con un proyecto grande en Brasil que nos tiene muy entusiasmados.