Design frontiers

Jonny Gallardo: "El diseño argentino es un buen referente a nivel latinoamericano"

Conversamos con el curador de la III Bienal Internacional Córdoba Ciudad DIseño, ex director del posgrado de Diseño del Mueble DiMU e investigador y docente de la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Diseño UNC (Universidad Nacional de Córdoba).

Por Vivian Urfeig

11.11.2022

Arquitecto, gestor cultural, curador e impulsor del diseño cordobés con proyección internacional: Jonny Gallardo es uno de los referentes más importantes de la movida que posiciona a Córdoba en un lugar de privilegio dentro de la escena nacional. El curador de la III Bienal Internacional Córdoba Ciudad Diseño repasa los hitos del evento que el mes pasado abordó la consigna Después del Presente a través de actividades, intervenciones urbanas, muestras, ciclos de cine, lanzamiento de premios y concursos. Y, además, el Congreso de Diseño que reunió en el Teatro Real figuras del nivel del diseñador paulista Humberto Campana, el antropólogo Néstor García Canclini, el arquitecto brasileño Vinicius Andrade, los diseñadores industriales Anabella Rondina, Francisco Gómez Paz y Matías Ferreyra, la diseñadora gráfica Griselda Fresler, la docente y diseñadora Laura Novik, y el diseñador de indumentaria Benito Fernández. Voces polifónicas que repasaron problemáticas actuales, como el futuro del habitar, la sustentabilidad, el género en el diseño y los procesos creativos.

“El objetivo fue generar un espacio de intercambio pero también de construcción colectiva y propositiva que contribuya al desarrollo del territorio en todos los sectores de la sociedad a través del diseño como eje estratégico transversal”, explica Gallardo. El arquitecto destaca el rol del diseño como clave para generar impacto cultural y determinante para anticipar futuros posibles. Desde este lugar, propone repensar el diseño desde todos sus campos de acción: “Para lograrlo es necesario interpretar el presente como la pre historia del mañana. Estamos viviendo un momento bisagra donde la aceleración de ciertos procesos transforma lo analógico en la prehistoria de lo que va a venir”.

Ganador del Sello Buen Diseño 2022 por el desarrollo de la silla Tiyacuy, está al frente de un estudio con base en Córdoba Capital que realiza trabajos de arquitectura (viviendas, espacios comerciales) y diseño industrial para todo el país. Es ex director del posgrado de Diseño del Mueble DiMU y actual miembro de su comité ejecutivo. También se desempeña como investigador y docente de la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Diseño UNC (Universidad Nacional de Córdoba) y facultades de Asunción (Paraguay) y Montevideo (Uruguay).

Gallardo junto a su silla Tiyacuy (der.) y la silla Saya (izq.). Gentileza Jonny Gallardo.

¿Cómo se logró la sinergía para organizar la tercera edición de la Bienal de Diseño que consiguió articular los sectores industriales, políticos y académicos?

El desafío fue colectivo. Junto a la comisión organizadora, el comité ejecutivo y las cámaras nucleadas en la Agencia de Desarrollo Económico de Córdoba (ADEC) logramos articular la gestión pública con la privada. La agencia nuclea a 35 instituciones que presentan un abanico con múltiples visiones sobre el diseño, además de la tradición universitaria histórica de Córdoba. De las siete instituciones, cinco cuentan con carreras vinculadas al diseño. Esta visión estratégica es clave, ya que por suerte, durante los últimos años, las autoridades políticas entienden lo importante que es el aporte del diseño. Que estos sectores se sienten a la misma mesa no es sencillo, pero una vez que se da hay que sostenerlo en el tiempo. Desde el intendente y el viceintendente Martín Miguel Llaryora y Daniel Passerini, hasta los concejales, decanos y el vicepresidente primero de ADEC, Hernán Soneyero, sabemos que es fundamental seguir trabajando hacia adelante con esta sinergía.

¿Cuáles fueron los ejes conceptuales que se destacaron durante la Bienal?

Buscamos apropiarnos de la ciudad. Hubo un hecho coyuntural que nos obligó a cambiar de sede, ya que por la pandemia el Hotel Sheraton donde habíamos realizado las primeras ediciones dejó de operar. Así, el Teatro Real ubicado en el centro fue determinante, no solo para potenciar y revalorizar el área sino para optimizar la circulación por las sedes que participaron, desde el Cabildo Histórico y la Manzana Jesuítica hasta las facultades y el Paseo del Buen Pastor, entre otras locaciones. En el Centro Cultural de la UNC se desarrollaron las muestras más significativas: ASOMA y veinte + veinte, que fue clave para visibilizar el acervo de diseño e integrar los materiales del catálogo de la Bienal. Los conceptos abarcaron distintos ejes: la incidencia del diseño en la innovación y el desarrollo; la responsabilidad social y ética del diseño; la sostenibilidad y la inclusión y la formación e investigación en diseño y su transferencia a la sociedad.

Escritorio pliego. Gentileza Jonny Gallardo.

¿Los premios ASOMA funcionan como incentivo a las nuevas generaciones de diseñadores?

La idea es instalar estos premios a partir de dos categorías que distingan por un lado a los diseñadores emergentes de todo el país y otra, que destaque la trayectoria y el camino recorrido de las figuras más relevantes. En este sentido la Asociación del Mueble Argentino (ASOMA) organizó una muestra en el marco de las actividades de la Bienal, cuyos productos fueron seleccionados por Humberto Campana, el diseñador que cerró las disertaciones del congreso y que evaluó los productos. Queremos cubrir el vacío que existe entre el producto y el sujeto que lo produce. Los finalistas van a participar de una muestra que se realizará entre el 12 y el 16 de diciembre en el MARQ (Museo de Arquitectura de Buenos Aires). Ojalá estos sean los primeros pasos de este premio que se propone conseguir prestigio y convertirse en el Compasso d’Oro latinoamericano.

¿Cómo evaluás el nivel del diseño nacional?

El diseño argentino es un buen referente a nivel latinoamericano y para entender esta razón hay que ir hacia atrás, a la calidad y excelencia de las universidades y la visión académica aún antes de ser considerado como una disciplina. Una vez instalada esa mirada se consolidó. Siempre estuvo presente y vigente, la conexión entre Argentina y Europa nos posicionó como un faro referencial. En Córdoba, por otra parte, la tradición industrial y el peso académico también traccionaron para reafirmar esta tradición. El posgrado en diseño sigue este recorrido desde 2004, cuando se creó para promover que los empresarios se empapen de los programas académicos y viceversa. El posgrado acorta los tiempos entre que se reciben y dan sus primeros pasos. Considero que es una herramienta clave, sobre todo en momentos de tanto cambio. Estos son tiempos de observación y elaboración de conclusiones que nos permitan, después del presente, habitar mejor ésta que es nuestra única casa.

Foto de portada. Muestra Tejer la Casa. Gentileza Jonny Gallardo.